sábado, 2 de octubre de 2010

Dos versiones

No.

Hoy te llamé telepáticamente sin quererlo. Sin quererlo ni un poco, de verdad, no me interesa y prefiero no hacerlo. Sin embargo te llamé y apareciste, y al verte volví a darme cuenta de que No, de que me das miedo, pena, un poco de asco. Porque vos lo quisiste así, generás en mí los sentimientos más bajos, más oscuros e hirientes-como vos. Me escapé rápido de tu sombra, como me escapo de los malos recuerdos, de lo que sé que es veneno, de los edificios en peligro de derrumbe.

Sí.

Hoy te llamé telepáticamente sin quererlo. Sin quererlo por esa manía de pretender que puedo sola, con y contra todo y todos. Sin embargo te llamé y apareciste, y al verte volví a darme cuenta de que Sí, de que me das besos, músicas, tanto tanto sol. Porque nosotros lo queremos así, generás en mí los sentimientos más altos, más claros y curativos-como vos. Me costó salirme de tu abrazo, como me cuesta salir de tu cama, de los sueños con gravedad cero, de las canciones que me envuelven y me vuelan.

No hay comentarios: